Introducción
El 10% de los reptiles en cautividad sufren distocias anualmente, el 42% ocurren en serpientes, 39% en tortugas y 18% en lagartos, siendo más común en ovíparos que en vivíparos.
Hembras primerizas y las que han tenido alguna distocia previa tienen predisposición a sufrir distocias.
El huevo retenido pocas veces es fértil, sin embargo los huevos extraídos por oxitocina, pero que no estaban retenidos, sí que se pueden incubar, sobre todo en tortugas. Se han obtenido fetos viables a partir de salpingotomía.
El pronóstico de supervivencia y fertilidad es favorable normalmente, aunque predispone a futuras distocias.
Etiología
Suele ser de origen desconocido, aunque la caquexia e incluso la obesidad, carencias nutricionales (hipocalcemia), manejo deficiente, temperatura inadecuada, la deshidratación, desórdenes hormonales, infecciones, cálculos urinarios, huevos deformes o aumentados de tamaño y defectos anatómicos del aparato reproductor son algunos de los factores predisponentes.
Las distocias pueden ser obstructivas por la imposibilidad del huevo de pasar a través del oviducto o cloaca o no obstructivas.
Se suelen hallar distintos microorganismos en las distocias, pero no está claro si causan ellos la distocia o si invaden beneficiándose de la distocia.
Los reptiles en cautividad se vuelven sedentarios con pobre tono muscular y la ovoposición requiere un importante esfuerzo muscular por lo que la debilidad conllevará a distocias.
Diagnóstico
Serpientes
En serpientes lo más frecuente es la retención del último o dos últimos huevos, pero que tras extraerlos tienen apariencia normal (puede deberse a la debilidad muscular).
El diagnóstico se basa en historia previa de ovoposición y la visualización de una masa caudal en especies ovíparas.
Debido al gran diámetro de las pitones, es difícil la detección visual del huevo retenido, por lo que es imprescindible el diagnóstico por palpación.
En vivíparos es aún más difícil detectar la retención del feto. La gestación en serpientes es larga y la predicción del momento del parto es difícil, por lo que detectar problemas en el parto es difícil. El esfuerzo prolongado y prolapso de cloaca son indicativos de dificultad de paso del embrión.
Los ultrasonidos no sirven para el diagnóstico de distocias, pero sí para determinar el estado del feto. Si se detecta que el feto está muerto, se extrae.
Lagartos
En lagartos también es frecuente observar una “impactación” por huevos cuando no come y sin embargo tiene el abdomen hinchado donde se puede observar el contorno de varios huevos. Estos signos son indicativos de gestación normal y lo único que se puede hacer para garantizar la correcta ovoposición es proporcionar un adecuado sitio de anidación.
Los lagartos grávidos sanos dejan de comer y pueden deambular torpemente a veces, pero se mantienen activos y alerta, mientras si existe distocia, dejarán de responder a estímulos externos padeciendo depresión (tanto en serpientes como en lagartos).
Aunque las serpientes soportan largos periodos de distocia, los lagartos suelen morir en varios días.
Los lagartos pueden poner huevos incluso en ausencia de machos, siendo normalmente infértiles y frecuentemente retenidos.
Quelonios
La retención de huevos en quelonios es prácticamente imposible de detectar sin el uso de radiografías, incluso con ellas es difícil determinar si existe retención. Suelen provocar distrés respiratorio que se alivia con la celotomía.
Si los huevos son anormalmente afilados, de cáscara demasiado gruesa, si presentan signos de depresión o esfuerzo o si la cloaca está inflamada, debe considerarse la extracción de los huevos.
Tratamiento
El tratamiento debe instaurarse en las 48 horas posteriores a observar el cese de la ovoposición o parto. Se han observado menos problemas posteriores y de supervivencia si se instaura el tratamiento inmediatamente en vez de tras esperar las 48 horas. La hembra puede terminar la ovoposición o parto de forma natural en estas 48 horas, pero es muy improbable que lo haga posteriormente a las mismas.
Dependerá de la especie a tratar, tipo de distocia y la duración de la misma.
El tratamiento básico es la aplicación de oxitocina 5-30 UI/kg intramuscular o intracelómico (1 UI/kg ha sido suficiente en tortugas) y calcio 500 mg/kg. Si el tratamiento no invasivo no funciona, se opta por una celiotomía.
Serpientes
Una de las maneras de solucionar la retención es empujar los huevos o embriones con un dedo a lo largo del vientre de la serpiente. Sin embargo, es posible provocar la ruptura del oviducto, prolapso del oviducto o incluso la muerte con este manejo. Por ello no es recomendable su aplicación.
Si el huevo asoma por la cloaca, podremos usar este método para terminar de sacarlo, pero podemos causar la ruptura de huevos e incluso la muerte, por lo que se debe aplicar con mucho cuidado.
La primera elección en tratamiento suele ser la de administrar hormonas pituitarias para estimular contracciones del oviducto como la oxitocina. Se suele dar una segunda dosis de oxitocina a los 20-60 minutos.
Como el efecto de la oxitocina se ve influenciado por la temperatura, habrá que mantener al paciente en su temperatura corporal ideal.
La oxitocina es más efectiva en las primeras 48 horas de distocia sobre todo en serpientes en los que la efectividad disminuye un 50% tras este periodo (en lagartos y quelonios sigue siendo muy efectiva).
La vasotocina arginina es un análogo natural de la oxitocina al cual se ha demostrado que es diez veces más sensible el oviducto, pero es difícil de conseguir, cara e inestable. Se administra 0.01-1 µg/kg vía intramuscular o intracelómica.
Estos dos fármacos aumentan la contractilidad del oviducto, por lo que están contraindicados en distocias obstructivas, en las cuales pueden causar desde la ruptura del huevo hasta la muerte del animal. Si observamos contracciones en el paciente, pero que es incapaz de expulsar el huevo o feto, no debemos administrar ni oxitocina ni vasotocina arginina.
La ovocentesis percutánea en serpientes permitirá que el huevo disminuya de tamaño al extraer la yema de su interior, pero debemos tener cuidado de no contaminar la cavidad celómica con el contenido del huevo. De esta forma, le será más fácil expulsar el huevo. La aspiración se debe realizar lo antes posible para evitar que el contenido del huevo solidifique y consigamos extraerlo. La ovoposición se llevará a cabo en las próximas horas tras realizar la aspiración aunque puede durar hasta 48 horas posteriores. Para acelerar el proceso de ovoposición tras aspiración, puede administrarse oxitocina. Si no expulsa el huevo en las 48 horas posteriores a la aspiración, se aconseja la cirugía de extracción del huevo para evitar posibles infecciones o peritonitis por la posible salida del contenido del huevo a través del orificio en la cáscara por la aspiración. Este método se puede usar también cuando el huevo asoma por la cloaca, facilitando su salida, incluso extrayéndola mecánicamente.
La cirugía es otra de las opciones. Para ello es necesaria la anestesia que además facilitará la relajación del oviducto y por tanto la palpación y posible extracción manual de huevo o feto (cuidado con causar prolapso y ruptura. Dependiendo del estado del oviducto y tejidos adyacentes, se realizará salpingotomía simple o múltiple, salpingectomía unilateral o bilateral ó ovariosalpingectomía unilateral o bilateral. No se podrá garantizar la supervivencia o futura reproducción del paciente hasta después de la cirugía.
La intervención se suele realizar 1 o 2 filas de escamas por encima del huevo o feto retenido. Se deberán extraer todos los huevos o fetos contenidos por la misma incisión o si es necesario realizaremos nuevas incisiones. El oviducto se cerrará con una sutura absorbible. Si se producen adeherencias o existen daños en los tejidos, hay que extraer todo el tejido reproductor. Sin embargo, suel ser difícil acceder a todo el aparato reproductor.
La salpingectomía suele ser habitual en distocias largas y especies ovíparas.
Lagartos
En lagartos se suele proceder haciendo una incisión ventral en línea media (librando siempre la vena central que se encuentra superficial en línea media) o incisiones bilaterales ventrolaterales.
Distocias por 20-30 huevos retenidos suelen ser muy comunes en iguanas verdes por lo que es frecuente realizar la salpingotomía en esta especia.
Si no hay intención de cruzar al lagarto de nuevo para la reproducción, está altamente recomendada la ovarisalpingectomía, disminuyendo así el tiempo de cirugía y previniendo la recurrencia de estos problemas.
El pronóstico prequirúrgico en lagartos es peor que en serpientes puesto que el estado general de los lagartos con distocia es mucho peor que el de las serpientes, sin embargo, observaremos un gran cambio de actitud en los lagartos si la cirugía ha sido satisfactoria.
Quelonios
La cirugía en quelonios suele ser innecesaria debido a la gran eficacia de la oxitocina en esta especie. Sin embargo, si no surtiera efecto o el huevo estuviera malformado, aumentado de tamaño o roto, habrá que realizar un procedimiento quirúrgico. La cirugía es más complicada debido al caparazón y la recuperación es más lenta, observando cambio en la actitud varios días después. La cirugía puede ser a través del plastrón o por cavidad celómica entrando craneal al fémur.
Referencias
1. Douglas R. Mader, Reptile Medicine and Surgery. Ed. Saunders. Chapter 42.