• Alimentación crías de reptil

    Autor: Aitor Aparicio González
    Traducción: Aitor Aparicio González
    Fuente: Ver referencias.

    El saco vitelino ofrece soporte nutricional para los neonatos durante los primeros días de vida y, en algunas circunstancias, es suficiente para atravesar una primera brumación en algunas especies. La mayoría de las crías de serpiente no comen hasta su primera muda, la cual se produce durante la primera y tercera semana después del nacimiento.

    Cuando tenemos muchas crías en un mismo grupo, puede ser necesario separarlas en grupos más pequeños para evaluar su estado de salud, nutricional y apetito independiente. La ganancia de peso semanal es un buen indicador del progreso del animal.

    La mayoría de las crías comen espontáneamente cuando se las ofrece comida apropiada (que debe ser acorde a su tamaño corporal) para la especie dada.

    Los insectos, crías de ratón (pinkies), pequeños lagartos, pollitos, pequeños huevos, trozos de fruta, termitas, babosas, pequeños peces, gusanos, pueden ofrecerse a las serpientes y lagartos insectívoros y carnívoros
    Los reptiles herbívoros aceptan mezclas de vegetales frescos rayados de acuerdo a su tamaño. Ciertamente, en especies herbívoras como la Iguana iguana, se ha demostrado que la inoculación de heces de adultos de la misma especie en el estómago del neonato, ayuda a estimular el apetito incrementando la eficiencia de la digestión.

    El valor nutritivo de la comida puede y debe ser mejorado para el rápido crecimiento de las crías. Las dietas vegetarianas se pueden mezclar con vitaminas y minerales comerciales. Los gusanos de la harina, grillos, cucarachas, también pueden espolvorearse. Una alternativa es enriquecer la alimentación de los insectos con vitaminas y minerales unos días antes de usarse para alimentar a los reptiles. Se recomienda suplementar la comida de los insectos con una mezcla de alfafa y cereales con alta proteína, se puede añadir a la mezcla calcio y vitaminas.
    En algunas especies, los hábitos alimentarios de los jóvenes son distintos a los adultos. Un error común es pensar que los ejemplares jóvenes de Iguana iguana deben tener una dieta más carnívora que vegetal a esta edad, cuando realmente requiere una alimentación totalmente herbívora a lo largo de su vida. Nuestra responsabilidad radica en saber que alimentación es la adecuada para la especie que tratamos.

    En algunas circunstancias, puede que no tengamos acceso a las preferencias alimentarias del reptil, por ejemplo, algunas serpientes tienen preferencia por ranas, pero debido a limitaciones geográficas, no se puede obtener esta presa. En estas situaciones, uno puede entrenar al neonato para alimentarlo con otras preferencias alimentarias. Podemos impregnar con el olor de la presa de su alimentación base otras presas a ofrecer al neonato. Aunque el método es efectivo, pueden ocurrir problemas, como deficiencias nutricionales si la cría se ve privada de su dieta apropiada durante períodos largos de tiempo.

    Independientemente, algunas crías rechazan comer voluntariamente. Hay numerosas técnicas que pueden usarse para estimular el apetito de las crías. En serpientes, es posible incitarlas a comer dando suaves golpes en su nariz con una pequeña presa. Esto incita a la serpiente a atacar. También podemos alimentar manualmente a la serpiente, situando la presa en la boca de la serpiente y calentando las presas antes de ofrecerlas para estimular el apetito. En algunos casos, en los que existe riesgo de que un reptil pueda caer en anorexia, puede ser necesario la alimentación manual y el entubado. Con estas técnicas hay que tener un cuidado extremo para prevenir cualquier daño de los tejidos y la mucosa de la orofaringe y esófago del neonato. Se puede hacer un puree con la presas habituales y administrarlo mediante un tubo esofágico, y a menudo es mucho más efectivo y menos estresante que la alimentación manual con presas enteras.

    Referencias


    1. Ross RA, Marzec G: The reproductive husbrandy of pythons and boas, Stanford, 1990, Institute for Herpetological Research.
    2. Porter Kr: Herpetology, Philadelphia, 1972, WB Saunders.
    3. Frye FL: Biomedical and surgical aspects of captive reptile husbrandry, ed 2, Melbourne, Fla, 1991, Krieger Publishing.
    4. Mader DR: Captive propagation of Chinese water dragon (Physignathus cocincinus), Proc North Calif Herpetol Soc, Special Publication #4:67, 1987.