Autor: (Carlos Mikel).

boaesmeralda.jpg

Taxonomia


Reino: Animalia
Phylum: Chordata
Subphylum: Vertebrata
Clase: Reptilia (Reptiles)
Orden: Squamata (Escamados)
Familia: Boidae (Boidos)
Nombre científico: Corallus caninus

Descripción

Su cuerpo es color verde esmeralda, lo cual hace referencia a su nombre común “Boa esmeralda”. En su dorso tiene manchas blancas (generalmente) y el vientre de color amarillo. Las crías son muy diferentes a los adultos, su cuerpo puede ser de color rojo intenso o anaranjado con manchas blancas.

Temperamento

Suelen ser agresivas, se les considera un reptil de display, esto quiere decir: “Ver y no tocar”.

Distribución

La boa esmeralda (Corallus caninus) tiene una amplia distribución; comprendiendo la mayor parte del norte de Sudamérica central. Abarcando una vasta zona de Sudamérica ecuatorial. Dentro de esta vasta zona la boa esmeralda tiene su hogar y ha prosperado por millones de años. Curiosamente, los avistamientos de estas boas se han dado a distancias considerables de los cuerpos de agua, esto, considerando que la mayoría de los boidos están directamente relacionados a cuerpos de agua.
Encontradas en sus poblaciones mas densas al sur ecuatorial de la cuenca del Amazonas, noreste de Perú y Sur de Colombia; hacia el norte se distribuye al sur de Venezuela, al este por el sur de Guyana, centro-sur de Surinam y la Guayana Francesa en la costa.

Terrario

Para un recién nacido o sub-adulto, se recomienda un terrario con dimensiones de 18”x9”x12”. Que sea impermeable, sellado, con troncos y aditamentos para sus hábitos arborícolas, pueden adaptarse múltiples adornos como plantas para que el ejemplar se sienta segura. El sustrato puede ser peatmoss desinfectado.

Temperatura

Muchos criadores recomiendan una temperatura constante en el dia de 27-32°, y en la noche que no baje mas de 26°.

Tamaño

Los adultos llegan a medir 2 metros.

Tipo de reproducción

Ovovivíparas. Sus huevos se desarrollan en el interior de la madre.

Número de crias

Pueden ser hasta 20 por camada.

Hábitos

Es una especie crepuscular-nocturna. De hábitos arborícolas.

Alimentación

Carnívoro, en cautiverio principalmente a base de ratones y ratas.

Frecuencia de alimentación

Adultos: 10-20% de su peso en alimento cada 20-28 días aproximadamente. Requieren una defecación completa (heces y uratos) por cada 2 comidas antes de proceder con la siguiente alimentación.

Neonatos: 10-20% del peso de la serpiente en alimento cada 12 a 24 días. Requieren de una defecación completa (heces y uratos) antes de cualquier comida posterior.

Sub-adultos: 10-20% de su peso en alimento cada 14.21 días. Requieren de una defecación completa por cada 2 tomas de alimento antes de cualquier comida posterior.

Humedad

Los niveles de humedad deben mantenerse entre un máximo durante el día de 65-80% y nocturna de 45-60%. Estas fluctuaciones de humedad día-noche son esenciales para mantener su salud adecuadamente. Durante el periodo de muda es recomendable mantener rangos de humedad de 70-80% día y noche.

Humedad en el ciclo de apareamiento:

Para fomentar el apareamiento de la boa esmeralda deben mantenerse rangos de humedad en el día del 65-90% en el día y en la noche serán de 50-65%. Mantemer estos rangos por 3 días seguidos. Esto, para fomentar la conducta de apareamiento.
Tamaño de la presa:
La presa no deberá res más gruesa que la parte media de la boa; si a caso, superarla ligeramente.

Fotoperiodo

Este es muy importante con ciclos de 12/12. 12 horas de luz y 12 de oscuridad.

Síndrome de regurgitación de la Boa esmeralda

El reto de salud mas común, para quienes mantienen en su colección un ejemplar de Corallus caninus es el ERS (Por sus siglas en inglés). La enfermedad conocida como “Síndrome de regurgitación esmeralda” es responsable de la mayoría de las muertes prematuras en esta especie, mas incluso, que cualquier otro patógeno conocido para la erspecie. Tiempo y recursos considerables se has destinado al estudio de este síndrome sin encontrarse hasta ahora la causa o causas del mismo.
En un documento elaborado conjuntamente por Kerry y Tom Swan Weidner se muestra un tratamiento con cierto porcentaje de eficacia. Aunque, comúnmente, o ejemplares que presentan este síndrome son sacrificados. Aunque, es posible seguir manteniéndolos con vida cierto tiempo, se ven comprometidos el crecimiento y la reproducción del ejemplar afectado, de igual manera, cualquier animal afectado por ERS representa un riesgo sanitario para una colección o población sana.
Sólo queda esperar a que se encuentren las verdaderas causas de este síndome y se pueda encontrar una cura eficaz. Y en caso de tener un ejemplar afectado, se busque asesoría profesional que evalúe el caso.

Consejos y técnicas de alimentación

Dónde y cuándo comenzar.

Después de que el problema del encierro de nuestra Corallus caninus ha sido resuelto satisfactoriamente, debemos estar seguros que el ejemplar se encuentra sin estrés y totalmente acoplado a su nuevo entorno para que sea factible que acepte alimento. Esto se logra en conjunto con un entorno adecuado y la NO MANIPULACIÓN de la serpiente.

Todo nuevo ejemplar debe ser puesto en cuarentena por un periodo aproximado de 90 días antes de ser integrado a la colección. Esto, aparte de salvaguardar la integridad de nuestra colección, le permite al nuevo integrante adaptarse a los nuevos cambios que ha sufrido en su encierro; periodo en el cual debe ser observado constantemente pero evitando al máximo la manipulación.
Los parámetros de temperatura y humedad deberán ser los óptimos.
Las señales que nos da la serpiente cuando está dispuesta a comes son variadas; pueden ir desde adoptar la posición de ataque en forma de “S” o la búsqueda intensiva de alimento a lo largo de su nuevo entorno.
Su alimentación en cautiverio es básicamente de roedores; en la naturaleza llegan a comer pequeñas aves y roedores.

Respuesta de alimentación:
Aprender cómo y qué desencadena la instintiva respuesta de alimentación es el primer paso. Una vez comprendido esto, se puede utilizar para establecer los patrones de alimentación óptima.

Los 4 principales desencadenantes son:
Propuesta- A pesar de que las boas esmeralda tienen una visión relativamente pobre, como la mayoría de las serpientes, son especialmente atraídas por el movimiento que perciben visualmente.

Calor- Las fosas termoreceptoras del Corallus caninus son su sistema de detección de calor. Proporcionan al animal un cuadro mas detallado de su entorno. Este sistema le permite “ver” en un entorno donde predomina la oscuridad. De igual manera le es muy útil para persibir el calor producido por su presa.

Olor- El movimiento de su lengua bifurcada, junto con el órgano de Jacobson, situado en el paladar, le permite a la Boa esmeralda localizar a su presa por medio del olfato así como olfatear el entorno.

Crepuscularidad- Esto se refiere a que su mayor actividad se presenta en horas que preceden al anochecer y anteceden al amanecer. Sin embargo, se pueden alimentar a cualquier hora de la noche, son mas receptivas al los estímulos presentados durante este periodo de tiempo.

El calor y el olor son los factores desencadenantes más importantes y útiles para el criador. Esto se debe a que son fácilmente explotables. El uso de estos principales desencadenantes permite a los poseedores alimentarlas más fácilmente.

Alimentando neonatos:

Para las crías de boa esmeralda, la alimentación debe ser una habilidad aprendida. Aunque, el instinto es, sin duda, el factor más importante. Es, a través de la alimentación temprana, que los recién nacidos asocian y reconocen las presas y periodos de alimentación. Esta costumbre es la que como propietarios queremos mantener. Así mismo, podemos, desde temprana edad acostumbrar al ejemplar a alimentarse de una variedad de presas. La cantidad de alimento será aproximadamente del 15% del peso de nuestra boa.

Primer ofrecimiento:

A los recién nacidos, a menudo se les ofrece después de la primer semana de haber nacido, algunos pueden ser receptivos y alimentarse, pero hay que resistir la tentación y esperar hasta después de la primer muda, esta se presenta alrededor de las 2 semanas de vida. Hay quien recomienda, incluso, se les alimente a la semana siguiente de su primer muda. Así se le permite absorber el vitelo y sr más receptivos a los estímulos de alimentación.
Si comenzamos ofreciendo ratones de primer pelo descongelados es una buena opción pues acostumbraremos al neonato a ese tipo de alimento. Este deberemos ofrecérselo previamente calentado (no cocido) con unas pinzas de alimentación, y hacerlo moviendo al ratón enfrente de la serpiente sin hacer movimientos muy bruscos. Algunos aceptarán el alimento de inmediato, algunos otros necesitarán más paciencia en su manejo. Es importante aclarar que si nuestra boa no acepta el alimento descongelado, no lo podemos volver a congelar, desecharemos ese ratón y, pasados unos días (4 por lo general) intentaremos con uno nuevo.
No ofrezca el alimento por periodos mayores a quince minutos, recuerde que hay que someter al mínimo estrés a las crías para tener éxito en su alimentación.
Las ventajas de alimentar de esta manera a las crías son enormes, así podemos tener congelada suficiente cantidad de alimento para tener siempre disponible y también evitamos cualquier accidente al momento de alimentarse como lo seria que un roedor mordiera a nuestra boa; y más cuando se hace la transición de ratón a rata.

Para los ejemplares que se niegan rotundamente a aceptar alimento descongelado, será necesario reforzar el hábito ofreciendo presas vivas. Es importante no ofrecer pinkis dado que estos casi no se mueven y ofrecerían un estímulo visual casi nulo y casi no tienen olor. Para esto es mejor ofrecer ratones de primer pelo o runners, estos ya tienen un olor propio y son muy activos.
Aproximadamente 2 horas después de la puesta del sol es cuando los instintos de caza estarán más despiertos. Para alimentar a una Corallus caninus con presa viva será necesario tenerla en un tupper pequeño para que sienta seguridad en su entorno, con un palo atravesado por la mitad, lo suficientemente alto para que la presa no pueda molestar a la boa y depositar al ratón en el fondo. Procuraremos tapar el tupper para evitar distracciones a la boa pero observar a través del plástico la evolución y aceptación del alimento o posibles problemas. Normalmente este método resulta eficaz, si no en la primer ocasión, si en la segunda. De no aceptar el alimento en la primer ocación, esperar 3-4 dias para ofrecer alimento nuevamente. Además, podemos variar el horario de alimentación hasta saber que horario prefiere la boa y así obtener mejores resultados.

Como última opción recurriremos a la alimentación forzada. Esta técnica es bastante estresante para el animal y solo será usada como última opción.

Una de las preguntas mas comunes es: “¿Cuándo debo preocuparme de que mi boa esmeralda no come?”. No existe una respuesta universal y única para esta cuestión; hay muchas variables a determinar como la condición del animal y las condiciones en las que se le mantiene. Esto determinará la resistencia del animal.
Pero supongamos que se trata de un sub-adulto, con parámetros óptimos, con peso corporal adecuado, bien hidratado y sin presencia de afecciones como una parasitosis. Este animal podría mantener un ayuno de 4 a 6 meses sin mostrar virtualmente signos de estar siendo afectada por esto. El metabolismo de la boa esmeralda es de los mas lentos, así que, en estas condiciones, no habría porque preocuparse. Cuando nuestra boa comience a adoptar la clásica posición de ataque, es momento de volver a alimentar.


Aspectos generales de prevención:

Recipiente de agua: Lavarse y desinfectarse cada 3-5 días.
Sustrato: Limpiar inmediatamente después de la micción y/o defecación y eliminar un mínimo de 5cm alrededor de la micción del animal.
Alimentación: Nunca ofrecer la misma presa a2 ejemplares distintos.
Limpieza de manos: SIEMPRE hay que lavarse y/o desinfectarse las manos y brazos al pasar del terrario de una serpiente a otra.
Aislamiento: Si un animal comienza con síntomas de alguna afección, inmediatamente tiene que ser retirado de la colección en general y mantenerse por separado hasta su total recuperación.

Estatus

Se le considera una especie amenazada ya que es cazada por su piel y vendida ilegalmente como mascota, así como por la pérdida de su hábitat.
La Corallus canunus es una serpiente no apta para principiantes, antes de adquirir una debes tener en cuenta la gran cantidad de aspectos necesarios para su correcta manutención y estar dispuesto a llevarlos a cabo.